miércoles, 17 de agosto de 2016

Rapsodia Transapocaliptica

Luego de la caída de los velos falaces
la verdad asoma su nariz entre los fenómenos.
Su rostro antiguo de eones transitados
no es tan agradable como un big-bang.

La ecuación caotica fue adulterada
por el avaro espíritu de la codicia.
Y llegamos a pie a este presente bastardo
cuyos padres aún prófugos 
atesoran pobres identidades valóricas
en frías bóvedas tras acciones anónimas.

Alimentos cancerígenos de materia prima transgénica
hincharon sus bolsillos ávidos.
Abusando de la neoesclavitud oculta tras sueldos míseros
construyeron castillos tecnocráticos con sangre, cal y canto.

Sobre la piedra angular de la ignorancia fomentada
brota la mala educación de la limosna y el crimen.
Sus hijos han crecido al mismo tamaño del abuso.
Fanáticos y cegados en su desinterés
buscan lo perdido en la oscuridad.

Solo encontraran con suerte 
una quemante luz
cuyos mensajeros traen la inquietud
al burgo que despierta borracho
con el alboroto de los villanos.
¿Cuando dejaremos esta  medieval farsa?